LOS QUERELLANTES CREEN QUE EL JUEZ RECIBIÓ MÁS DE 80.000 EUROS DE LA PETROLERA
Garzón tendrá que responder al Supremo si pidió dinero a Cepsa para ir a Nueva York
Garzón atiende a los medios en Sevilla (Efe).
Baltasar Garzón tendrá que aclarar ante el Tribunal Supremo el próximo 15 de abril si, además de pedir dinero al Banco Santander, también reclamó a Cepsa financiación para su estancia académica en Nueva York entre 2005 y 2006.
El juez comparecerá ese día como imputado ante la Sala de lo Penal del alto tribunal para responder de la querella presentada por dos abogados, que le acusan de supuesta prevaricación y cohecho por los fondos que recibió de la entidad que preside Emilio Botín para costear su año sabático en Estados Unidos.
José Luis Mazón y Antonio Panea, que ejercen la acusación popular en la querella contra Garzón, presentaron el pasado día 12 una batería de diligencias en la que solicitan, entre otras pruebas testificales y documentales, que se "libre oficio a Cepsa para que informe de los posibles patrocinios abonados a la Universidad de Nueva York".
Los abogados aseguran tener indicios de que el magistrado de la Audiencia Nacional reclamó donativos a varias entidades, entre ellas Cepsa, y han pedido al Tribunal Supremo que se dirija a la petrolera para que aclare si contribuyó con 86.000 euros a sufragar el permiso académico de Garzón en Estados Unidos.
Durante su declaración ante la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo, el próximo día 15, Garzón deberá responder en primer lugar a las preguntas del instructor de la causa, Manuel Marchena; luego a las del fiscal; a continuación a las de Mazón y Panea, y por último a las de su abogado defensor.
Segunda imputación
Los dos querellantes han confirmado a El Confidencial que interrogarán a Garzón acerca de la supuesta financiación recibida de Cepsa y si se dirigió personalmente a la dirección de la compañía petrolera -como hizo con Botín- para reclamar fondos destinados a su estancia en Nueva York. El magistrado, no obstante, podrá negarse a contestar a las preguntas de Mazón y Panea, como ya hizo el pasado 9 de septiembre, cuando compareció ante el Tribunal Supremo -también como imputado- por la causa abierta por el magistrado Luciano Varela por las desapariciones durante la Guerra Civil y el franquismo.
Cepsa ni confirmó ni desmintió la supuesta financiación de los cursos de Garzón. Un portavoz oficial de la compañía presidida por Santiago Bergareche se limitó a señalar a El Confidencial que el máximo responsable de Cepsa en los años del supuesto pago al magistrado de la Audiencia Nacional era Carlos Pérez de Bricio, y añadió, ante la insistencia de este periódico en verificar si en los archivos contables y documentales de la petrolera aparece un apunte de 86.000 euros con destino a la Universidad de Nueva York, que "no va a ser posible obtener esa información".
Mazón y Panea interpretan que la respuesta de la petrolera es un "claro indicio" de que Garzón recibió fondos de Cepsa para patrocinar su estancia en Estados Unidos, por lo que ambos presentaron el pasado día 18 un escrito de alegaciones ante la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo en el que, citando la información de El Confidencial, reclaman "la identificación de la persona encargada en Cepsa de gestionar dicho patrocinio". Los abogados sostienen que "podríamos estar ante otro presunto acto de cohecho impropio del querellado".