El Poder Judicial rechaza por el momento la dimisión del vocal Gómez Benítez
El pleno del Consejo General del Poder Judicial apagó ayer como pudo el fuego que provocó el vocal José Manuel Gómez Benítez, que el lunes presentó su dimisión de la comisión que elige a los altos cargos judiciales tras denunciar el mercadeo en los nombramientos. Con los rescoldos de la fractura aún humeando, en particular entre los vocales progresistas, el órgano de gobierno de los jueces decidió ayer por mayoría, 16 votos frente a cuatro, rechazar la renuncia de Gómez Benítez, que, contra su voluntad, se mantendrá en su puesto hasta octubre, cuando se renueve el mandato de las distintas comisiones del Consejo. La sesión plenaria de ayer, la más «tensa» en el año y medio de vida del actual Consejo, es la de «la huida hacia delante». Primero, porque ni al protagonista de las denuncias le han permitido marcharse; y segundo, porque los vocales afectados por sus acusaciones -la progresista Margarita Robles y el conservador Manuel Almenar- han podido hacer público su malestar con un breve comunicado como pretendían.