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El hecho de constar en un listado de fundaciones y organizaciones no gubernamentales –ONG-, ambas bajo la fórmula del sin ánimo de lucro, no supone a estas alturas la ausencia de profesionalización. Pues, precisamente a esto tienden la mayoría de ellas, uno de los caminos más seguros para llegar sanos y salvos a la eficiencia. La lucha contra la pobreza, la potenciación de la innovación, la mejora de la salud o la protección del medio ambiente se pueden llevar a cabo bajo tintes similares que los de una empresa en busca de beneficios. De profesionalizar la entidad como si de una organización empresarial se tratara, contando con la potenciación de habilidades directivas y con un equipo de trabajo mixto (voluntariado y personal remunerado) se habló en el diario Cinco Días la semana pasada. La misma semana en la que conocimos que la Organización Médica Colegial (OMC) cambia de nomenclatura, y se atreve a incluir entre sus nuevas siglas la P, la P de Profesión –Consejo General de Colegios Oficiales de la Profesión Médica- , tras haber definido en su Asamblea General los conceptos de profesión médica y profesional médico. No podíamos perder la oportunidad en el Blog de las Profesiones, de destacar la importancia que en los últimos tiempos se está concediendo a la necesidad de extender la profesionalización en instituciones, en colectividades, e incluso en los poderes públicos.

¿Saliendo de la tormenta perfecta?

Posted: 06 Apr 2010 08:27 AM PDT

Crisis y periodismo, de la mano y haciéndose aguadillas. La una a la otra. "Los periodistas tenemos doble crisis: económica y de internet", dice Jon Lee Anderson. No salimos de esta tormenta perfecta. "Algunas naves se hundirán, otras se romperán en mil pedazos, unos tripulantes podrán agarrar tablas y llegar a las costas, otros no". Del cinismo a la utopía. Pero, como decía Jeremy Rifkin hace unos días, "no hay empatía en la utopía"; el mundo real requiere aceptar lo imperfecto, porque una sociedad empática siempre será imperfecta. La revolución vendrá de la mano de la comunicación, a brazadas. Y del compromiso. El mismo que contagian Periodismo Humano y Cuarto Poder, dos recientes iniciativas virtuales alimentadas por periodistas que baten las piernas con fuerza, arrojo y conciencia. Como la difunta adn.es, a la que recuerda poderosamente -en su forma de entender las posibilidades de la Red, en su apuesta por la calidad- La Información.com. El juego cambia, pero las conciencias siguen latiendo. Tic, tac. Tic, tac. Se impone el periodismo de calidad de Frontera D, la búsqueda de lo excepcional en Koult o el periodismo hiperlocal de Somos Malasaña. Las grandes se deciden por cobrar, otros aseguran su independencia (y su existencia) como pueden para hacernos llegar secretos. El periodismo no solo resiste, también se la juega. Veremos si pierde o, contra pronóstico, termina emergiendo. Ganas todavía quedan. Fte. Blogprofesiones

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