LOS DOS LÍDERES ABERTZALES DEFIENDEN EL FIN DE LA VIOLENCIA
Interior mantiene en prisiones diferentes a Arnaldo Otegi y a Rafa Díez Usabiaga.
El ex portavoz de Batasuna, Arnaldo Otegi, junto al ex secretario general del sindicato LAB Rafa Díez (Efe).
Carlos Fonseca.- 22/03/2010
El Ministerio del Interior no quiere que Arnaldo Otegi y Rafa Díez Usabiaga, principales impulsores del debate interno en la izquierda abertzale, compartan prisión, y el pasado noviembre trasladó al primero a la cárcel de Navalcarnero (Madrid) desde la de Estremera (Madrid), donde permanece el que fuera líder del sindicato LAB. Ambos representan la línea partidaria del final de la violencia, ahora mayoritaria en el mundo radical,.
Otegi y Díez Usabiaga fueron detenidos en octubre de 2009 junto a otros seis militantes abertzales, acusados de ser los integrantes de Bateragune, el órgano de dirección de la izquierda abertzale en sustitución de lo que fue la Mesa Nacional de Batasuna. El juez Baltasar Garzón los procesó a todos ellos el pasado enero por un delito de integración en organización terrorista.
Los citados Otegi y Díez Usabiaga, Miren Zabaleta, Arkaitz Rodríguez, Sonia Jacinto, Txelui Moreno, José Manuel Serra y Amaia Esnal ingresaron inicialmente en la cárcel de Soto del Real (Madrid) y días después fueron conducidos a la de Estremera. Los tres últimos quedaron en libertad bajo fianza (Txelui Moreno ejerce ahora de portavoz de la izquierda abertzale) y el resto fue dispersado entre noviembre y diciembre pasados. Sólo Usabiaga y Sonia Jacinto permanecen en Estremera. Miren Zabaleta fue conducida a la cárcel de Mansilla (León), Arkaitz Rodríguez en la de Albocàsser (Castellón) y Otegi a la de Navalcarnero. La dispersión, pues, ha afectado a todos ellos, pero resulta especialmente relevante en el caso de Otegi y Díez Usabiaga.
Posiciones políticas idénticas
Fuentes penitenciarias consultadas por este diario manifestaron que ambos líderes mantienen en prisión posiciones idénticas a favor del fin de la violencia, según ha quedado reflejado en las comunicaciones que mantienen con terceras personas.. Como cualquier otro preso acusado de un delito de terrorismo, Otegi y Díez Usabiaga han sido incorporados al Fichero de Internos de Especial Seguimiento (FIES), que tienen intervenidas todas sus comunicaciones.
Esta circunstancia, que ambos conocen, no ha impedido que Otegi afirmara a un interlocutor, cuya identidad no ha trascendido (recibe la visita de su mujer y de las abogadas Jone Goiricelaia y Arantxa Zulueta, entre otras), que o ETA “se suma a la procesión (en alusión a la apuesta de la izquierda abertzale por las vías políticas y democráticas) o se suicida”. El contenido de dicha conversación fue adelantada días atrás por El Mundo.
Varios interlocutores de prisiones aseguran que Otegi goza de gran predicamento en el “frente de makos”, como ETA define a sus presos, lo que puede favorecer aún más la apuesta por el fin de la violencia entre los reclusos de la banda terrorista. Las mismas fuentes interpretan que el hecho de separar a ambos dirigentes puede obedecer a la intención de sondear el grado de identificación de sus posiciones políticas y conocer a las personas que visitan a cada uno de ellos.