La crisis, que por cierto ya tiene nombre, la gran recesión, para distinguirla de la madre de todas las crisis la del 29 que se denomina la gran depresión, comenzó de forma muy sincronizada, es decir casi al mismo tiempo en todo el mundo, “tos por iguá” que se diría en mi pueblo.
En cierto modo es la primera gran crisis planetaria, dejando aparte la del 29.
Pero la salida de la crisis depende del barrio en que se viva. Asia está creciendo casi al 10%. Los países que envían las materias primas a China, como Australia y latinoamérica están creciendo al 5%.
Estados Unidos y la Europa Central están creciendo al 2,5%.
Y la periferia Europea está estancada y rogando para que los prestamistas le permitan seguir recibiendo préstamos a un precio razonable.
Europa ya salvó a Grecia y ahora rescata a Irlanda. Los siguientes que serán atacados por los mercados se supone que pueden ser Portugal y España.
Por cierto, por Grecia aparecieron los Chinos, con ganas de prestar dinero y que Europa, tenga una deuda de favores. Además de la deuda contante y sonante. Si algo les sobra a los chinos es dinero para prestar.
El primer mercado del mundo para China es Europa. Y el que menos problemas les ocasiona. Europa está muy abierta a los productos chinos.
Así que si todo fracasa y Angela -la alemana- no nos quiere prestar el dinero, siempre queda la opción de pedirle el favor a China.
Los chinos estarán encantados de ayudar y mantener su mejor mercado y unos aliados cómodos. Aula Fácil
