Amedo, en el centro de la 'trama'
Se prepara una campaña de intoxicación contra Rubalcaba sobre la base del GAL
M. Á. Menéndez
El fantasma de los GAL 'resucita' en España: el ex subcomisario José Amedo, condenado por su participación en aquellos hechos, está empezando a tirar de 'su' manta. Nadie sabe qué bazas reales se guarda Amedo de aquellos años, pero en medios socialistas no cabe duda de que se está preparando una intensa campaña de intoxicación contra el vicepresidente primero, ministro del Interior y portavoz del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba. Según ha sabidoDiariocrítico de fuentes solventes, en los próximos días asistiremos a una nueva fase de la ofensiva, tomando por diana la cabeza de Rubalcaba.
Diariocrítico dio el primer aviso el pasado 16 de febrero, con una noticia exclusiva titulada "Amedo se mueve otra vez", en la que anunciábamos que el ex policía había empezado a realizar algunas llamadas a determinadas personas que ocuparon cargos en los gobiernos de Felipe González con la aparente intención de que alguno se pusiera nervioso, como por ejemplo, Julián Sancristóbal, que fue director general de la Seguridad del Estado con González, cargo que ocupó durante todo el periodo en el que actuaron los GAL (Grupos Antiterroristas de Liberación). Nadie creía entonces que Amedo tuviera nada nuevo que contar, pero se pensaba que quería poner en marcha el ventilador de la intoxicación para volver de nuevo a la palestra.
El pasado 28 de julio, diario e-Xclusivo publicó que Amedo, a quien pese a sus llamadas no se le había tenido en cuenta por la actual dirección socialista, estaba planeando una comparecencia en la Audiencia Nacional para llevar determinada 'documentación' o, más bien, sus particulares explicaciones sobre casos supuestamente no conocidos de la etapa de Felipe González. Según esas informaciones, la intención era atacar, sobre todo, al ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, que cuando se destapó públicamente todo el asunto de los GAL (años 1994 a 1996) formaba parte del último gobierno de González y que ejercía entonces, precisamente, como portavoz del Gobierno.
Finalmente, el pasado 2 de agosto, diario e-Xclusivo dio cuenta de cómo el ex subcomisario llevó ese mismo viernes a la Audiencia Nacional documentos que, según él, aclaraban lo que sucedió en los atentados de 1986 a los bares Bazoki y Consolation, de Bayona y San Juan de Luz, respectivamente. Aunque el único imputado en esa causa es el que fuera jefe de información de la de Brigada de Bilbao, Miguel Planchuelo, y aunque Amedo ya fue juzgado por esos hechos, todo parecía indicar que el subcomisario pretendía implicar a los que a su vez considera 'culpables' de su larga estancia en la cárcel.
En el punto de mira
A la vuelta del verano, el diario El Mundo inició un serial donde Benegas y Rubalcaba estaban ya en el punto de mira, sobre supuestos pagos o promesas de pagos a Amedo y al también ex policía Michel Domínguez, o a sus mujeres, supuestamente ofrecidos a lo largo de 1995 y 1996 por Benegas y Rubalcaba, directamente, o a través de intermediarios, según la versión de Amedo. Lo cierto es que la versión no es nueva, y grosso modo está contenida en su libro de 'memorias' que publicó en 2006.
Tras la crisis de Gobierno, en la que Rubalcaba asumió la Vicepresidencia Primera además de mantener el Ministerio del Interior, el diario El Mundo publicó el pasado lunes 1 de noviembre una nueva entrega con el título "Rubalcaba era el eje de la negociación entre Amedo y Benegas". Aseguraba el periódico que en 1996, el abogado y empresario Raúl Martín recibió el encargo del dirigente socialista de comprar las cintas que tenía el ex policía y que supuestamente involucraban al Gobierno en los GAL, de hablar con el juezGarzón y de tratar con el coronel Perote.
Lo curioso es que esa publicación -según ha sabido Diariocrítico- coincide en el tiempo con determinadas llamadas que el ex subcomisario habría realizado a ciertos dirigentes socialistas, y se cree que esas llamadas podrían estar conectadas con el inicio de una posible 'trama conspiracionista' para poner en marcha el 'ventilador de la intoxicación'. Así, en el Partido Socialista están convencidos de que Amedo ha puesto en marcha toda la maquinaria de una forma similar a como ya lo hizo a partir de 1994 y que a partir de ahora se va a iniciar una durísima ofensiva contra Pérez Rubalcaba con el objetivo de debilitarle tras su nombramiento como 'número 2' del Gobierno.