La investigación de una acción terrorista aún sin esclarecer
La Guardia Civil achaca al nuevo jefe militar de ETA el asesinato de Juan Carlos Beiro
El instituto armado considera que Mikel Kabikoitz Carrera Sarobe participó en los atentados que acabaron con la vida del cabo langreano y del presidente del PP en Aragón, Manuel Giménez
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Mikel Kabikoitz Carrera Sarobe. iimagen cedida por tve
Langreo, L. M. D.
El nuevo jefe militar de la banda terrorista ETA, Mikel Kabikoitz Carrera Sarobe, podría ser uno de los autores del atentado que mató al cabo langreano de la Guardia Civil, Juan Carlos Beiro Montes. Hasta el momento, la Benemérita no había puesto nombre y apellidos a los posibles autores de la muerte del agente, que se produjo el 24 de septiembre de 2002 en la localidad navarra de Leiza. Las últimas investigaciones desarrolladas por el instituto armado involucran al jefe militar de ETA en varios atentados mortales, incluidos el de Beiro y el del presidente del Partido Popular en Aragón, Manuel Giménez Abad, que se produjo en Zaragoza el 6 de mayo de 2001.
Fuentes de la Benemérita informaron esta semana a RTVE que la banda terrorista ETA tiene nuevo jefe militar, Mikel Kabikoitz Carrera Sarobe. La Guardia Civil lo considera el responsable del envío de explosivos a la base que el grupo terrorista tenía en Portugal, desmantelada hace dos semanas. La investigación sobre la infraestructura etarra en Portugal llevó hasta Francia, desde donde se enviaron los explosivos incautados en la localidad portuguesa de Óbidos.
La pista del nuevo jefe militar se localizó en una furgoneta interceptada el 9 de enero en Zamora. Unos días antes Carrera Sarobe había alquilado el vehículo en Besançon (Francia). En esta agencia de alquiler de coches el etarra presentó una tarjeta bancaria, tal y como es obligatorio en el país vecino. Este tipo de tarjetas sólo se otorgan si se tiene un domicilio conocido. El nuevo jefe militar de ETA alquiló, con identidad falsa, una habitación que nunca llegó a ocupar en la zona de la Borgoña, en Macon. Con esta maniobra, ETA disponía de un vehículo legal para trasladar armamento entre Francia y Portugal sin levantar sospechas. Sin embargo, la furgoneta fue interceptada en Zamora.
Los antecedentes de Mikel Kabikoitz Carrera Sarobe antes de ocupar la jefatura militar de la banda terrorista lo sitúan en el sector más duro de ETA, alineado con las tesis de Txeroki y contrario a las de Thyerry (dos ex jefes ya detenidos). Carrera Sarobe huyó a Francia en 2003 sin estar fichado. La Guardia Civil sospecha que junto a Ohian Brandalla (detenido en Francia en 2007) formó parte de un comando que operó en la zona de Navarra y de Aragón. El instituto armado considera ahora que Carrera Sarobe puede ser uno de los responsables de los atentados mortales que se produjeron en esta zona entre 2001 y 2003, entre ellos el del cabo langreano de la Guardia Civil Juan Carlos Beiro, y el del presidente del PP en Aragón, Manuel Giménez Abad, unos atentados cuyos autores materiales aún no habían sido esclarecidos.
Según explicó esta semana el Ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, ETA tenía en su base de Portugal unos 300 kilos de explosivos listos para usarse en un atentado inminente. A lo largo de la semana, además, la Guardia Civil detuvo a cuatro presuntos etarras en el País Vasco y Cataluña, donde, según el Ministerio de Interior, pretendían montar una nueva retaguardia logística, una vez desmantelada la base de Portugal. El primer presunto terrorista en ser detenido fue Ibai Beobide, que iba en bicicleta, armado y con 3.000 euros. Tras los interrogatorios con Beobide se pudo interceptar también a Jon Rosales y Adur Arístegui. Tras estas detenciones, según fuentes de la lucha antiterrorista, Carrera Sarobe habría enviado a Faustino Marcos Álvarez a recomponer la infraestructura de la banda en la península, para lo que se quería utilizar Cataluña como base (pretendía alquilar una masía cerca del Pirineo). Sin embargo, este presunto terrorista también fue detenido.
A lo largo de los últimos años, la Benemérita ha ido deteniendo a miembros de ETA que parecían estar involucrados en esta serie de atentados no resueltos. Sin embargo, las investigaciones no habían fructificado. La Guardia Civil vincula ahora al nuevo jefe militar de la banda terrorista, Mikel Kabikoitz Carrera Sarobe con estos atentados.
