"Pedro Mari" Corral y Ana Botella: han dejado el
Madrid cultural en la ruina
Ana Botella
ha anunciado que no se presentará como candidata a la alcaldía de Madrid
–tampoco lo había hecho antes– pero deja una herencia envenenada y teñida
de mafia rosa: primero su concejal de cultura, Ignacio Villalonga
y después su sustituto, Pedro
Corral, conocido como "Pedro Mari" tras su censura
a la exposición "Con
dos colores", han dejado el campo cultural madrileño
arruinado y como un erial. No a causa de sus creadores sino de la
mediocridad y abuso de sus gestores. El
despilfarro, la corrupción y el endeudamiento ha sido descomunal,
por lo que una futura comisión de investigación deberá aclarar si hubo “sobrecostes”
en las obras que han enfangado Madrid
en las tres últimas décadas, qué interés real tuvieron y cual es su actual
uso y su déficit. Los adalides del liberalismo y el libre mercado en el Ayuntamiento de Madrid,
la alcaldesa no electa Ana
Botella y su concejal “Pedro Mari” Corral subvencionaron
con 38 millones de euros a la empresa de Timothy Chapman y su pareja Ignacio Herrera de la Muela,
a la vez que colocaron al hermano de éste, Juan José Herrera de la Muela
(que ejerce de “cuñado”), como alto cargo del ayuntamiento con 60.000 euros
de sueldo. Amiguismo, corruptelas, enchufes, privilegios… Mientras la
mayoría de los jóvenes artistas españoles están en el paro y sufren lo
indecible para sobrevivir y el resto de los ciudadanos vive ahogado por los
impuestos o el desempleo, Timothy
Chapman organiza lujosas fiestas en lugares públicos (Centro Conde Duque)
para el embajador norteamericano en Madrid,
James Costos,
y su pareja, Michael
Smith, lo cual ya ha sido denunciado. Es lo que en Madrid se
conoce como uno de sus más poderosos lobbys político-culturales: “la mafia
rosa” del PP-PSOE,
que dirigen en la sombra el ex secretario de Estado de Cultura, Miguel Angel Cortés (PP),
perteneciente al “clan
de Valladolid” (por su cercanía a Aznar y ahora
por otros motivos a Rajoy),
y el ex director de la Casa
Encendida, el socialista andaluz José Guirao (PSOE),
hoy presidente de la antigua Fundación
Caja Madrid, una institución a la que tras los numerosos
escándalos del banquero
Blesa y su “escudero” regio, Rafael Spottorno,
le cambiaron el nombre y ahora se llama Fundación Obra Social y Monte de Piedad de Madrid.
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