D.
Manuel Fraga o la honradez española
Ha muerto un gran español... creo que es
el mejor epitafio que debiera figurar en su lápida; y aparte de su grandeza, su
vida ha representado el trabajo esforzado por una España mucho mejor; y todo
ello basado en la honradez más limpia y que difícilmente pueda presentar
cualquier político... este fue insobornable y por tanto incorruptible... “ha
debido sufrir mucho viendo como la corrupción a inundado España entera y la que
incluso ha llegado a la familia real; cosa inconcebible.
En esto se pareció
a su primer jefe político... Franco, al que le pueden criticar muchas cosas,
pero como hombre honrado y queriendo a España, no se le puede criticar mucho...
Fraga fue igual... España perdió con él un magnífico presidente de gobierno
en la nueva época... No lo digo ahora, lo dije cuando marchó a su Galicia y allí
demostró lo que era en realidad; o sea un verdadero hombre de Estado (un
estadista); puesto que a simple vista se apreciaba ello, visitando aquella
región. Y lo digo como visitante a la misma, muchos años después de que antes lo
hiciera y aún gobernando Franco... hice un artículo glosando grosso modo cuanto
vi y pude apreciar y el Sr. Fraga al llegar a sus manos aquel artículo, tuvo la
gentileza de enviarme unos preciosos libros editados sobre las bellezas y
valores de Galicia y como agradecimiento al mismo.
Mucho antes y
encabezando “su Alianza Popular”, me enfrenté a él, preguntándole con toda
crudeza... “qué nos podía ofrecer su partido a la esquilmada Andalucía y en
particular a la más esquilmada Jaén, mi provincia natal”. La pregunta fue
a teatro lleno en el hoy desaparecido Asuán... pero aquella pregunta
obtuvo una ovación cerrada... y una respuesta oportuna de quien (entonces)
aspiraba a presidir un gobierno, al que nunca le dejaron llegar; puesto que no
les interesaba ni a los nacionales, ni a los extranjeros; que optaron por otros
más manejables; entre ellos Felipe González Márquez; al que también lo
prepararon, para que, rompiendo con el viejo socialismo español... “hiciera el
nuevo que hemos padecido (igual que el anterior lo padecimos) y como el otro,
“al servicio de potencias e intereses extraños a España”... y a la vista está
como estamos en España y dentro de ella aún peor en Andalucía... “aquella
Andalucía por la que yo pregunté hace más de treinta años al Sr. Fraga”...
“Treinta años en que han mangoneado los “nuevos socialistos” (que no
socialistas) y que nos han dejado peor que imaginarse podía
entonces”.
Y no le dejaron llegar a
presidente nacional, por cuanto Fraga, también se parecía “a su paisano gallego”
(El caudillo Franco); y los que estaban apostados para mangonear y esquilmar a
la España posterior a Franco... no les interesaban hombres autoritarios y menos
a un Fraga, que aparte de serlo, era enormemente culto y versado en política
nacional e internacional, puesto que recordemos fue embajador, nada menos que en
Londres; puesto que también sabía idiomas... y como se decía... “en la cabeza de
Fraga cabe todo” (yo añado cabía todo lo bueno); y ese fue el temor de los
mercenarios que hemos sufrido después... Sí, Fraga fue un gran español y como
tal ha muerto... “con las botas puestas y como corresponde a esos españoles que
recoge la historia de esta tan desagradecida e hipócrita
nación”.
Y si he puesto
la palabra honrado y lo asocio a la honradez de Franco, es por cuanto tanto uno
como otro, pudieron hacerse inmensamente ricos, simplemente ejerciendo el poder
que tanto uno como otro tuvieron en sus manos... sin embargo, ni a uno ni a
otro, nadie ha podido decir que se llevasen... “ni una sola peseta que no fuese
suya”... en el caso de Fraga, también se puede decir lo mismo con el euro,
puesto que Fraga ha sufrido como el resto de españoles, la nueva
moneda.
Ahora y después de
muerto, todo son alabanzas y parabienes... hasta el comunista Carrillo, lo ha
valorado enormemente... pero toda esta gente y en vida del mismo, sólo ha
guardado silencios cobardes y cómplices; y a lo sumo murmullos e incluso
calumnias, como por ejemplo; la de cuando “le volaron su chalé” (única propiedad
inmobiliaria que se le conoce) y en que los perversos que siempre hay
aquí, movieron el que si la reconstrucción del mismo, la había pagado el
Estado Español, vía Ministerio de la Gobernación, del que en su tiempo fue
titular D. Manuel Fraga.
No sólo fue honrado a carta
cabal, sino que fue insobornable... cosa esta que viendo todo lo que nos ha
caído después y que sigue cayendo, dan ganas de llorar... pero aquí no se llora
a los grandes hombres... aquí se les despide con la grandísima hipocresía de las
grandilocuentes lisonjas, cuando ya no pueden responder... cuando ya están
muertos y a punto de ser enterrados... cuando ya los hipócritas no pueden
recibir el justiciero daño que en realidad merecen muchos de estos...
“plañideros o plañideras”; dignos (muchos de ellos) del mayor de los desprecios
que un español pueda sentir.