Zarrías defiende la legalidad de 'Villa PSOE' donde tendrá de vecino a José Blanco
El consejero de Presidencia de la Junta, Gaspar Zarrías, confirmó ayer que el apartamento que ha decidido comprarse en Pontevedra –y que aparece en la actualización de su declaración oficial de bienes– pertenece a la polémica urbanización de lujo situada en Isla de Arosa y conocida en Galicia como ‘Villa PSOE’ en la que también han adquirido propiedades otros dirigentes socialistas, entre ellos el vicesecretario general del partido, José Blanco.
El PP había reclamado el lunes una explicación al también vicepresidente primero de la Junta sobre esta adquisición, sobre todo teniendo en cuenta que la urbanización había sido denunciada por una supuesta vulneración de la Ley de Costas, toda vez que el complejo, de cuatro bloques, se levanta en los terrenos que ocupaba un pinar virgen a tan sólo 20 metros de la playa, cuando la normativa estatal prohíbe las edificaciones a menos de 100 metros del mar y la Ley del Litoral de Galicia amplía esa franja de protección hasta los 500 metros.
Como respuesta, Zarrías remitió ayer una carta al secretario general del PP, Antonio Sanz, en la que, por encima de todo, defiende la legalidad de la urbanización y explica que su adquisición se debió, básicamente, a los lazos familiares que le unen con la localidad, toda vez que allí vivió durante su infancia y allí sigue acudiendo, siempre que puede, «desde hace 45 años».
En cuanto a la legalidad de la urbanización, el consejero esgrimió una resolución de la Fiscalía de Pontevedra que, el pasado 30 de enero,decretó el archivo de una denuncia presentada por la Confederación de Afectados por Estafas Inmobiliarias (Cafines), así como una resolución del Defensor del Pueblo gallego que tampoco amparó a esta asociación en su denuncia contra la urbanización de Isla de Arosa.
Además de ello, Zarrías explica en su carta a Antonio Sanz que, antes de comprar el apartamento –de 55,54 metros– se informó de que todo el proceso de urbanización se había desarrollado de forma «legal». En tal sentido, Zarrías alude en su misiva a órdenes del Ministerio de Medio Ambiente durante la etapa de gobierno del PP referidas a la urbanización en cuestión, al PGOU de la zona aprobado por la Xunta de Galicia durante el gobierno de Fraga o a la licencia concedida al promotor –Alonso Riego, un ex alcalde y ex parlamentario del PP gallego– por el Ayuntamiento de Isla de Arosa –gobernado por el PSOE– con el acuerdo de todos los grupos políticos.
Sobre lo que no hace una sola mención Gaspar Zarrías en su carta explicativa al PP es sobre el hecho de que otros dirigentes socialistas hayan coincidido con él al adquirir en esa misma urbanización otros apartamentos. En concreto, habrían comprado también propiedades en el mismo complejo el vicesecretario general del PSOE, José Blanco; el número dos del PSOE gallego y hasta ahora consejero de Trabajo de la Xunta, Ricardo Varela; el hasta ahora consejero de Medio Ambiente, Manuel Vázquez; y el ex alcalde socialista de Vigo Ventura Pérez Mariño, entre otros.
Sobre esta circunstancia respondió ayer Gaspar Zarrías tras la reunión del Consejo de Gobierno en una comparecencia en la que se mostró inquieto y nervioso, algo en absoluto habitual en su trayectoria. Sin ir más lejos, la primera pregunta sobre esta polémica la resolvió leyendo de cabo a rabo la carta remitida al secretario general del PP.
Preguntado luego sobre si, antes de interesarse por la promoción, conocía que otros dirigentes socialistas habían comprado allí y si alguno de ellos le había ‘asesorado’ en la zona, Zarrías sugirió que la coincidencia ha sido meramente casual: «Allí hay 126 compradores y creo que hay seis socialistas; de los otros 120 desconozco su sexo, raza o ideología y tampoco me preocupa». También rechazó que alguno de ellos le sugiriese la compra del inmueble. «No es que nadie me lo indicara –dijo–. Conozco el terreno como la palma de mi manoporque tuve la suerte, aunque como consecuencia de una desgracia, de vivir allí durante bastante tiempo. Y de visitar prácticamente dos días al año la zona vi cómo (la urbanización) se empezó a construir e hice las gestiones ante la inmobiliaria para acceder a un apartamento».
Finalmente, el consejero de Presidencia aseguró que, a pesar de la polémica, seguirá adelante con la compra del apartamento. «Por supuesto que voy a seguir adelante con la compra. Estoy en mi derecho», concluyó.