La esposa de Bono, su hija Amelia y el piso en las afueras de Madrid.
La Gaceta
Amelia no trabajaba cuando compró esta casa en una exclusiva zona de Madrid
La hija de Bono se compró un ático de 631.062 euros con sólo 24 años
En el momento de la venta pudo hacer frente al pago de 233.919 euros en efectivo
Es un piso de 130,79 metros cuadrados y 34 de terraza en una urbanización de lujo de las afueras de Madrid
El ático fue comprado en 2005, cuando Amelia Bono tenía 24 años. En la actualidad trabaja con su madre, Ana Rodríguez Mosquera, en la gestión de las tiendas Tous. En la declaración de bienes e ingresos que hizo José Bono ante la Fiscalía, el presidente del Congreso aseguraba que su hija había tenido unos ingresos brutos de 32.159 euros.
Sin embargo, esa cantidad hacía referencia a 2008. En 2005, cuando se escritura la compra de este ático de 130,79 metros cuadrados más 30 de terraza, la joven Amelia Bono pudo liquidar 233.919,20 euros del precio total del inmueble. Hoy carga con una hipoteca de 450.759 euros.
En enero de ese año había constituido la sociedad Bluni Toledo SL, una empresa dedicada al diseño de moda que fue creada con un capital de 3.100 euros y que no registra actividad aparente. También es, desde 2007, administradora dela sociedad Ópalo 81, que gestiona el local propiedad de su hermana pequeña, Sofía, de 10 años.
Anteriormente pertenecía a la esposa de José Bono y se encuentra en el centro comercial calle Ancha de Albacete. En esta zona comercial, la familia Bono Rodríguez posee el único espacio en propiedad, puesto que la empresa que la gestiona solamente alquila sus establecimientos. La sociedad Ópalo 81 perdió 27.671 euros en 2008. Como el resto de los hermanos, es propietaria de una participación del 5% de Hípica Almenara, una sociedad que en su último ejercicio declarado dio unos beneficios de316.100 euros, pero que no reparte dividendos entre sus propietarios.
SIN TRABAJO PERO CON CRÉDITO
Pese a no tener en apariencia ingresos suficientes en 2005, no encontró ningún problema para acceder a la financiación necesaria para hacerse con la propiedad de este ático. Lo hizo por un precio de 631.062,76 euros, que es la cantidad en la que ha escriturado la vivienda. La joven no desembolsó el total del dinero en un único pago, sino que –como viene siendo habitual en las compraventas realizadas por la familia– dividió el mismo en varias partes. Según recoge la nota registral, a la que ha tenido acceso La Gaceta, 60.000 euros fueron pagados antes de la escritura.
Del resto, 172.991 euros se abonaron a los vendedores mediante un cheque bancario del que se desconoce el titular de la cuenta, pero perteneciente a la entidad Bancaja. Un total de 928,20 euros fueron entregados en efectivo durante la firma de la escritura. El resto de la cantidad se financió mediante la subrogación de la nueva propietaria a la hipoteca de los anteriores dueños, que ascendía a 397.143,56 euros. Posteriormente, la joven amplió la hipoteca a la que tenía que hacer frente hasta la cantidad de 450.759 euros.
Nuevamente concedida por Bancaja, pese a no tener ingresos fijos conocidos derivados de su actividad profesional porque fue otorgada antes del inicio de sus trabajos de representación de Tous, labor que ejerce con su madre. El notario ante el que se firmó este documento fue Miguel García Gil, habitual en las transacciones que realiza el promotor Rafael Santamaría. Como el resto de sus hermanos, Amelia forma parte del accionariado de las empresas familiares Saja e Hípica Almenara. En concreto, tiene el 12% de la primera y el 5% de la segunda. En la declaración hecha pública por el presidente del Congreso de los Diputados, confirmaba que su hija mayor tenía un piso en propiedad, aunque no informaba de su valor. También explicaba que en 2008 los ingresos brutos de su hija Amelia habían ascendido a un total de 32.159 euros.
El ático, comprado por Amelia en pleno apogeo de la burbuja inmobiliaria, fue un caso excepcional de contención del precio. La primera escritura, tras la construcción del inmueble, recoge un precio total de 469.991,47 euros, que fueron abonados por sus primeros propietarios. Cuando éstos decidieron ponerla en venta no debieron seguir la evolución del mercado. Fijaron como precio un valor que apenas incrementaba en un 30% el precio que ellos habían pagado casi cuatro años antes.
Es decir, que mientras para el resto de los compradores de vivienda la subida media anual superaba el 15%, para la hija del dirigente socialista el aumento de precio fue de la mitad. A ctualmente una planta baja en la misma urbanización está en venta por 1,25 millones de euros. Es decir, en cinco años y pese a la crisis del sector que ha hecho caer los precios de las casas en los dos últimos años, la propiedad de la hija del presidente del Congreso de los Diputados ha duplicado el suyo.
Originalmente publicada en La Gaceta.