La sucia política de... “todos los tiempos”
En uno de tantos debates sobre política (hoy todo el mundo habla de política) surgen opiniones y disparates; pero al final llega la cruda realidad y que no es otra que la de siempre... “el rebaño seguimos dominado por los pastores y sus perros” y es claro que nos siguen llevando a donde ellos quieren, o a donde empujan los pésimos gobiernos que llevan “al rebaño” a lugares donde ya... “ni hay pasto ni agua”.
Sonriendo para mis adentros y con la tristeza que da el reconocer la realidad; termino diciéndoles a mis “contrincantes” lo que sigue y que una vez escrito, lo aprovecho para un artículo más, que sé positivamente no servirá para nada.
Bueno; mi artículo ha servido para ciertos desahogos y algo es algo; puesto que la realidad es que estamos impotentes y siempre dominados por unas camarillas infinitamente mejor organizadas que nosotros y de ahí su fuerza. Con ella y teniendo "el tornillo y la llave de tuercas", van apretando todo cuanto pueden y más, puesto que no les motiva otra cosa que "el poder y el dinero"; los que no comulgan con esos “ideales” y salvo las excepciones que quieran... no se comen una rosca y tienen que irse.
En su momento lo dijo y en “épocas de aviones y automóviles”; nada menos que un presidente norteamericano, con las contundentes palabras que siguen: “En Estados Unidos (EE.UU.) el desprestigio alcanzado en los años treinta del pasado siglo, fue tal, que el Presidente, F.D. Rooselvet se vio obligado a salir al paso con esta recomendación[i]... “Tenemos que luchar para que la palabra político deje de ser un insulto”. No se puede decir y reconocer más en menos palabras, por cuanto huelgan comentarios... ¿qué nos espera en el presente y el futuro?... me temo que más de lo mismo, tal y como vamos viendo desarrollarse la política nacional o incluso internacional en mayoría de países.
De ahí, el que (y es terrible) la mayoría de la juventud actual (desorientada, drogada, alcoholizada, congelada o en estado de hibernación; insensible a otras cosas que no sean los goces materiales y sin mucho esfuerzo para conseguirlo) falta de esa ilusión que incluso tuvimos muchos, en los muy duros años de la época peor del franquismo; no creen en la política de ningún signo o color.
Seguro que si se investigara el cuarenta por ciento de las abstenciones, de las últimas elecciones en Cataluña; apostaría doble contra sencillo, que en mayoría son esos jóvenes entre los dieciocho años y los treinta y cinco; que hoy despectivamente se clasifican como la generación “nini”; a la que yo pondría dos letras más, o sea “ninini”, que traducido sería “ni trabaja, ni estudia... ni tienen ilusiones”; puesto que se las han machacado hasta un grado que ya veremos las consecuencias que ello traerá consigo y a no tardar mucho.
Como muestra un dato: En Japón es ya alarmante la cantidad de jóvenes, que simplemente se suicidan, por que –seguro- están asqueados de la vida.
Antonio García Fuentes
(Escritor y filósofo)