sponsor

Cambiar tamaño del texto


Sports

Tamaño del texto: 10 12 14 16 18

LA POLICÍA SE DEFIENDE DEL CHIVATAZO A ETA

Telesforo Rubio contra Marlaska: "Ni me llamó, ni me tomó declaración"

Carlos Fonseca.-

Telesforo Rubio contra Marlaska: "Ni me llamó, ni me tomó declaración"

Grande-Marlaska (Archivo)

Telesforo Rubio, comisario general de Información cuando se produjo el ‘chivatazo’ a ETA, se defendió ayer de las acusaciones hechas en su día por el juez Fernando Grande-Marlaska de haber ocultado la filtración durante 72 horas. El que fuera máximo responsable de la lucha antiterrorista, actualmente destinado en la embajada de España en Moscú, manifestó a este diario que el juez Marlaska “ni me llamó, ni me tomó declaración” por lo ocurrido. También el Sindicato Unificado de Policía (SUP), mayoritario en el Cuerpo, calificó al magistrado de “jurídicamente irresponsable y moralmente miserable” por señalar al citado comisario como sospechoso.

Los hechos ocurrieron el 4 de mayo de 2006, pero el reciente conocimiento de algunos documentos sumariales ha permitido conocer el enfrentamiento que el magistrado tuvo con los servicios antiterroristas tras la frustrada operación contra una red de extorsión de ETA que tenía su sede en el bar El Faisán de Irún. En una providencia del 22 de mayo de 2006 Marlaska recriminaba a Telesforo Rubio no haberle informado del ‘chivatazo’ hasta el mediodía del día 8 de mayo con un informe de dos folios, pese a que conocía lo ocurrido desde el mediodía del día 5, según reveló este diario el pasado sábado

El ex comisario general de Información explicó a este diario que la operación contra el bar El Faisán era dirigida por el juez Marlaska y la magistrada Laurence Levert, que tenían a sus órdenes a un Equipo Conjunto de Investigación (ECI) integrado por policías españoles y franceses y que él no conocía los detalles de su trabajo. Telesforo Rubio explicó estos extremos al juez con otro oficio en el que manifestaba que los funcionarios que escucharon en directo la conversación entre José María Elosua, dueño de El Faisán, y su yerno, Carmelo Luquin, en la que el primero le comentaba que una persona acababa de alertarle por teléfono de la operación policial en marcha, informaron de ello al inspector jefe Carlos G., que dirigía la misma y que durante la tarde de ese mismo día 4 de mayo estuvo con el juez en su despacho de la Audiencia Nacional. Este funcionario fue designado después por el magistrado para investigar la filtración.

“Con independencia de que participara sobre las 12,50 horas del día 5 a su comisario jefe de la UCI y al Comisario General el hecho de la filtración que se había producido en la mañana del día anterior, lo cierto es que, con independencia de su gravedad, no aportó apoyo documental, sino más bien generalidades que se encargaría de aclarar él mismo (…) En ningún momento estuvo impedido de comunicar inmediatamente con ese juzgado o al de guardia la grave incidencia que conocía”, dice el escrito de Telesforo Rubio al juez.

Respuesta contundente del sindicato mayoritario de la Policía

El SUP califica la actuación de juez Marlaska de “difícil de comprender por ilógica, desproporcionada y errónea”, y le recrimina que si sospechaba que el comisario general de Información pudo ocultar datos debía haberle tomado declaración, cosa que no hizo, como tampoco se puso nunca en contacto telefónico con él. “El chivatazo solo consiguió retrasar veinte días unas detenciones –dice un comunicado de la ejecutiva del sindicato- y ese retraso se produjo porque la juez Levert se negó a llevarlas a cabo. Ahí es donde debe buscarse a los verdaderos autores del aviso a los recaudadores de ETA sin lanzar más cortinas de humo ni mentiras, con la complicidad por error u omisión del juez, contra un policía honrado gracias al cual se conoció y se pudo iniciar la investigación”.

Fashion