El CGPJ revisa el funcionamiento del juzgado que investiga el caso Carioca
23/06/2010 - Miguel Olarte / El Progreso (Lugo)
La situación que se vive en el juzgado de Instrucción número 1 de Lugo, del que depende la operación Carioca contra la prostitución, ha llamado la atención del Consejo General del Poder Judicial, el órgano que se encarga del control de los jueces. Un equipo de inspectores de este órgano comenzó este martes una inspección del juzgado que dirige Pilar de Lara.
Esta inspección coincide en el tiempo con una sorprendente filtración del sumario, todavía secreto para las partes, a medios de Madrid, que ha puesto el punto de mira de la atención nacional sobre este asunto. La decisión del CGPJ podría ser la consecuencia de la unión de dos circunstancias: por un lado, se trataría de constatar que el volumen de trabajo en este juzgado es tal que se necesita un juez de apoyo para desatascarlo, tal y como solicitó ya hace meses la magistrada titular; y, por otro, las protestas contra algunas decisiones de Pilar de Lara por parte de varios abogados, sobre todo en relación con la instrucción del polémico caso Carioca.
Sin embargo, según pudo constatar este diario, las quejas no sólo se refieren a dicho sumario, sino al hecho de que muchos juicios por faltas están prescribiendo, y no sólo en el juzgado de Instrucción número 1.
Los juicios de faltas son los únicos que celebran los juzgados de instrucción. Se trata de asuntos que no alcanzan la categoría de delitos: muchos accidentes de circulación, hurtos con botines de menos de 400 euros o lesiones sin gravedad, por ejemplo. El periodo de prescripción de estas faltas por inactividad procesal es de seis meses, y la cantidad de los que han prescrito en las últimas semanas comienza a ser ya preocupante y revela el grado de atasco que se está produciendo. Y eso que, según las fuentes consultadas, alguno de los juzgados de instrucción hace tiempo que está archivando por sistema los juicios por faltas referidos, por ejemplo, a tráfico, con lo que consigue que, una vez cerrada la vía penal, estos procedimientos pasen a los juzgados de lo civil.
El exceso de trabajo en los juzgados de Instrucción de Lugo, sobre todo en el 1 y en el 3, ya había sido denunciado anteriormente por el representante territorial de Jueces para la democracia, Luis Villares, que había solicitado que fueran reforzados.