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El 'sueño' de Dubai se esfuma y deja una oleada de protestas y denuncias

El empresario sigue en los calabozos mientras la Policía interroga a descontentos y colaboradores para determinar nuevos cargos · Los afectados se concentran ante el Ayuntamiento de Punta Umbría

M. Rosa Font / Huelva | Actualizado 14.05.2010 - 11:10

Un joven llegado desde el País Vasco hasta Punta Umbría para un puesto de trabajo en Dubai muestra el 'Huelva Información' de ayer.

A muchos les cogió por el camino la noticia de la detención del hombre que había despertado las ilusiones de miles de parados de España, otros desembarcaban en Punta Umbría sin saber aún que José Manuel Gutiérrez, el empresario que prometía sueldos de 15.000 euros mensuales en Dubai por colocar cristales en un rascacielos, había pasado su primera noche en los calabozos de la Policía Nacional. En principio, se trata del único detenido, imputado -de entrada- por un delito contra el derecho de los trabajadores.

La noticia corrió como la pólvora y apenas hubo que esperar para que se produjeran las primeras reacciones y protestas. A primera hora de ayer, más de un centenar de personas se concentraban a las puertas del Ayuntamiento para reclamar información sobre la presunta estafa del empresario, mientras agentes de la Policía Local se ofrecían a tomar los datos de las personas que fueron llegando a la zona.

Durante la mañana se registraban las primeras denuncias contra la oferta ficticia, que la Embajada de los Emiratos Árabes en España calificó ya el miércoles de "falsa" y sobre la que, según el subdelegado del Gobierno en Huelva, Manuel Bago, la diplomacia española en Dubai dio la voz de alerta porque los millonarios sueldos que Garrido prometió a los aspirantes "eran inimaginables en la realidad social de aquel país.

Bago confirmó que la oleada de denuncias ha comenzado pero no pudo concretar el número de personas que se han decidido ya a exigir responsabilidades, sin descartarse que los afectados puedan reunir fuerzas en una plataforma para plantear una demanda conjunta.

El empresario pasaba su segundo día en los calabozos de la Comisaría de la Policía Nacional de Huelva, mientras la Policía Judicial continúa tomando declaración a personas de su entorno, colaboradores y afectados por la promesa de trabajo para esclarecer las intenciones del empresario. La Policía tiene en mente agotar el tiempo de detención -salvo que se produjera un giro- para poner a Garrido a disposición de la autoridad judicial, lo que supondría que será mañana sábado cuando sea trasladado al Palacio de Justicia y el juez determine finalmente los cargos contra él, entre los que se habla ya de supuesta estafa.

La Policía Nacional requirió el miércoles a Garrido a que se personara en la Comisaría para presentar documentación en la que verificara la oferta de trabajo y fue después de su comparecencia cuando los investigadores decidieron proceder a su detención. Al testimonio del empresario, le seguían sus antecedentes policiales con un amplio historial de imputaciones.

Bago pidió "máxima cautela" a todas aquellas personas que "motivadas por esta oferta tan extravagante y con condiciones laborales tan extraordinarias puedan ser sorprendidas en su buena fe", por lo que pidió que "nadie vaya con ingenuidad a este tipo de ofertas laborales" e indicó que cualquier persona que se considere afectada por algún tipo de delito presente una denuncia en defensa de sus derechos.

La primera reunión del empresario con los trabajadores tuvo lugar el pasado domingo en la Peña Flamenca de la localidad, a la que acudieron exclusivamente desempleados locales, mientras que en los tres últimos días han ido llegando al pueblo personas de toda España en busca de un puesto de trabajo. Las condiciones hablaban de un sueldo diario de 600 euros, con viajes y estancias pagadas, vacaciones cada dos meses y contratos de tres meses prorrogables.

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